martes, 2 de diciembre de 2014

Taller 1, diferentes definiciones de evaluación. (26/08/2014)

Este primer taller se realizó con el fin de comenzar a diferenciar las  definiciones de la evaluación, durante su historia, y a que intenciones obedecen.


Introducción

El Portafolio es un método de enseñanza-aprendizaje y evaluación que consiste en la aportación de producciones de diferente índole por parte del estudiante a través de las cuáles se pueden juzgar sus capacidades en el marco de una disciplina o materia de estudio. Estas producciones informan del proceso personal seguido por el estudiante, permitiéndole a él y los demás ver sus esfuerzos y logros, en relación a los objetivos de aprendizaje y criterios de evaluación establecidos previamente.
El portafolio como modelo de enseñanza - aprendizaje, se fundamenta en la teoría de que la evaluación marca la forma cómo un estudiante se plantea su aprendizaje.
El portafolio del estudiante responde a dos aspectos esenciales del proceso de enseñanza-aprendizaje, implica toda una metodología de trabajo y de estrategias didácticas en la interacción entre docente y discente; y, por otro lado, es un método de evaluación que permite unir y coordinar un conjunto de evidencias para emitir una valoración lo más ajustada a la realidad que es difícil de adquirir con otros instrumentos de evaluación más tradicionales que aportan una visión más fragmentada. (Fuente: http://www.recursoseees.uji.es/fichas/fm4.pdf)

Personalmente, ha sido una experiencia muy enriquecedora, pues por una parte me ha permitido conocer una nueva metodología para la evaluación, a la que se le puede sacar mucho provecho, a la vez que fomenta la autonomía y reflexión del estudiante con respecto a su proceso; por otra parte, por ser la primera vez que lo realizo, no fui lo suficientemente organizada para sacarle un mayor provecho, entonces me vi muy corta con los tiempos. Pero creo que ese error también me permitió aprendizaje, ya que me hace poner énfasis en el aspecto organizacional de mi práctica como estudiante y posteriormente como docente. 
Creo que el portafolio es una gran herramienta para integrar en la labor docente, tanto para aplicarla en el aula (pues propicia una evaluacion cualitativa, enfocada en los procesos), como en el mismo desarrollo docente.



Instrumento de observación con aplicación

Enlace directo para acceder al:

Instrumento de observación con aplicación

"Manual de evaluación educativa" cap. 5, María Antonia Casanova


Evaluación de la Prueba


Prueba de Filosofía


 


EVALUACIÓN Filosofía 4° año medio
Paulina Flores
Evaluación de los Aprendizajes

Nombre:
Curso:
Fecha:
Puntaje total:   11 pts.
Puntaje obtenido:
Unidad
La filosofía y el sentido de la vida humana

Contenidos
*Distinción entre preguntas empíricas, formales y filosóficas.
*Las preguntas filosóficas como preguntas frente a cada una de las cuales se han articulado rangos abiertos, pero acotados de respuestas inteligibles y racionalmente defendibles que, en ocasiones, llegan a contradecirse sin perder por ello el respeto mutuo.
*La filosofía como una pluralidad abierta pero acotada de visiones globales del mundo y del conocimiento que dan sentido a la vida humana tanto internamente como en dialogo unas con otras.

Aprendizajes esperados:
  1. Clasifican preguntas en preguntas empíricas y preguntas formales.
  2. Reconocen las similitudes y diferencias entre preguntas empíricas y preguntas formales.
  3. Distinguen las preguntas filosóficas de las empíricas y formales.
  4. Valoran la precisión del lenguaje en la argumentación filosófica.
  5. Reconocen que frente a una pregunta filosófica existe un rango abierto de respuestas que son por igual inteligibles y racionalmente defendibles.
  6. Reconocen el valor que tiene la variedad de posiciones frente a los asuntos filosóficos para el desarrollo del pensamiento.
  7. Analizan un texto filosófico y toman posición frente a esa propuesta.

Instrucciones generales
  1. I Ítem. Marque claramente la alternativa escogida en cada una de las preguntas de opción múltiple.
  2. II Ítem. Su argumentación debe ser articulada, sólida y lingüísticamente correcta.
  3. III Ítem. Se adjunta una rúbrica para que desarrolle claramente su respuesta.
  4. En los dos últimos ítems de desarrollo, cuide que su letra sea clara y legible, de no cometer faltas ortográficas y de redacción.

I Ítem: Opción múltiple. Elija sólo una alternativa, por cada pregunta. (5 pts.).

1.- ¿Cuál de estas es una pregunta formal?
a. ¿por qué se producen las lluvias?
b. ¿cuántos lados tiene un cuadrado?
c. ¿a qué temperatura se dilatan los metales?
d. ¿existe vida después de la muerte?
e. ¿qué es la justicia?

2.- ¿Cuál es la similitud entre preguntas formales y preguntas empíricas?
a. se dirigen hacia hechos y objetos concretos.
b. siempre obedecen a un principio intelectual de ver las cosas.
c. tienen un rango abierto de respuestas.
d. conducen a la reflexión.
e. siempre tendrán una respuesta única.

3.- ¿Cuál de los siguientes conceptos precisa a las preguntas filosóficas?
a. apuntan a la captación de la realidad por medio de los sentidos.
b. son producto de la mente humana y no necesariamente de la realidad concreta.
c. admiten una diversidad de respuestas.
d. tratan de verificar o falsear un juicio sobre la realidad.
e. no consideran la experiencia para formular su respuesta.

4.- ¿Cuál o cuáles de las siguientes preguntas apuntan al dominio de la Metafísica?
a. ¿En qué consiste el misterio de la existencia?
b. ¿Cuáles son los fundamentos de nuestras certezas?
c. ¿Por qué cambian las culturas?
d. ¿Cuál es el sentido y causa del existir del cosmos?
e. ¿Por qué no actuamos, directamente, como los animales?

5.- Jaspers encuentra que el valor de la filosofía es algo muy discutido, pues no se encuentran en ella unanimidad ni universalidad, como sí se encuentran en los resultados de la ciencia. Al reflexionar sobre esta idea llega a:
a. afirmar que la certeza de la filosofía es distinta a la científica y por lo tanto, es imposible que arroje resultados similares.
b. plantear que el objeto de la filosofía es diferente y superior al de la ciencia, pues ella se ocupa de la totalidad del ser y no de objetos específicos.
c. plantear que en cuestiones filosóficas todos los hombres se creen competentes y por lo tanto, no hay acuerdo entre ellos.
d. demostrar que las verdades científicas involucran a todo el género humano, mientras que las filosóficas sólo a unos pocos.
e. la filosofía como tal, no tiene valor alguno diferente al de una simple diversión.

II Ítem: Argumentación. Elija sólo una alternativa y desarrolle, en el recuadro dado su posición. (3 pts.).
6.- ¿Tiene sentido la vida humana? Elija una de las alternativas y defienda con argumentos su posición:

1) Sí lo tiene. Cumplir la voluntad divina;
2) Sí lo tiene. Crear riqueza y engrandecer a la patria;
3) Sí lo tiene. Luchar por la justicia y promover la vigencia universal de los derechos humanos;
4) No lo tiene. Solo somos una especie animal más que ha surgido recientemente en la evolución de la vida sobre la Tierra;
5) No lo tiene. Mientras existan los seres humanos los poderosos dominarán a los débiles.
6) No lo tiene. Todas las obras humanas desaparecerán con el tiempo.


III Ítem: Análisis de texto. (3 pts.).
7.- Lea atentamente el texto de Carla Cordua y explique en cuáles de estos usos de la palabra “sentido” podemos preguntarnos por el sentido de la vida humana.
Entre las varias acepciones de “sentido” hay una que claramente se aparta de las demás; según ella el sentido es la dirección de algo, su orientación hacia [...] “El camino tiene un sentido norte-sur”. “El tráfico de la avenida discurre en dos sentidos“. “Caerse de un balcón es moverse en sentido vertical”. Esa aplicación de “sentido” como “hacia donde”, no tiene un “sentido” como su contrario. Lo que se opone a este uso es, más bien, lo que carece de dirección o de orientación; a veces, es lo inmóvil literal o metafóricamente. Aunque este significado del término es antiguo y muy interesante, no lo consideramos aquí, para volver a ocuparnos del par “sentido-sinsentido”. Las varias acepciones de estos contrarios en el lenguaje ordinario tienen en común que se mueven en las proximidades de los términos “valor” y “desvalor”, “importante” y “carente de importancia”. A menudo se los puede reemplazar por estos últimos términos. Afirmar de una acción que no tiene sentido muchas veces quiere decir que da lo mismo llevarla a cabo o no, que no cuenta para [...], o es indiferente. Este uso se conecta con el mencionado antes: “sentido” como dirección, propósito o meta. Lo que posee una dirección hacia un fin posee el carácter de un movimiento dirigido hacia un logro o resultado. El valor de la actividad o del proceso depende de que se cumpla su para qué, de que alcance el propósito que los animaba. Lo que carece de para qué, en cambio, es pobre no sólo en resultados finales, sino que carece también de importancia porque no conduce a nada. Es obvio que entre estos varios usos de “sentido” y “sinsentido” en el lenguaje de todos los días hay varios desplazamientos semánticos y contaminaciones de unos significados con otros. Observar sus relaciones internas no autoriza a sostener que en sus acepciones ordinarias “sentido” significa siempre una y la misma cosa.
Carla Cordua. “Sentido y sin sentido”. En su Impresiones y Ocurrencias (Ril, Santiago de Chile, 2001).


Rúbrica, pregunta 7

Criterios
Por lograr
Medianamente logrado
Logrado
Destacado
Realiza una lectura reflexiva del texto.




Conoce y desarrolla un vocabulario básico de términos filosóficos.




Argumenta de manera coherente y consistente, dando cuenta de sus competencias interpretativas.









Matriz de especificaciones prueba de Filosofía




UNIVERSIDAD DE SANTIAGO DE CHILE
FACULTAD  DE HUMANIDADES
DEPARTAMENTO DE EDUCACIÓN
PREGRADO








Curso: Evaluación de los aprendizajes.
Profesora: Paulina Salinas Fritz

MATRIZ ESPECIFICACIONES

Nivel de profundidad
Habilidad
Preguntas
Objetivo de aprendizaje
Puntaje
SUPERFICIAL
Identificar
De las siguientes alternativas ¿Cuál es una pregunta formal?
a. ¿por qué se producen las lluvias?
b. ¿cuántos lados tiene un cuadrado?
c. ¿a qué temperatura se dilatan los metales?
d. ¿existe vida después de la muerte?
e. ¿qué es la justicia?
Identificar entre preguntas: empíricas, formales y filosóficas.








Reconocen las similitudes y diferencias entre preguntas empíricas y formales.








Distinguen las preguntas filosóficas de las empíricas y formales.











Delibera entre los grandes dominios de las preguntas filosóficas.







Deducen y valoran la importancia de la filosofía para el desarrollo del pensamiento.





















Reconocen el valor que tiene la variedad de posiciones frente a los asuntos filosóficos para el desarrollo del pensamiento.
Reconocen que frente a una pregunta filosófica existe un rango abierto de respuestas, que son por igual inteligibles y racionalmente defendibles.







Analizan un texto filosófico y toman posición frente a esta propuesta.
1
Comparar
¿Cuál es la similitud entre preguntas formales y preguntas empíricas?
a. se dirigen hacia hechos y objetos concretos.
b. siempre obedecen a un principio intelectual de ver las cosas.
c. tienen un rango abierto de respuestas.
d. conducen a la reflexión.
e. siempre tendrán una respuesta única.
1
Definir
¿Cuál de los siguientes conceptos precisa a las preguntas filosóficas?
a. apuntan a la captación de la realidad por medio de los sentidos.
b. son producto de la mente humana y no necesariamente de la realidad concreta.
c. admiten una diversidad de respuestas.
d. tratan de verificar o falsear un juicio sobre la realidad.
e. no consideran la experiencia para formular su respuesta.
1
PROFUNDO
Juzgar
¿Cuál de las siguientes preguntas apuntan al dominio de la Metafísica?
a. ¿En qué consiste el misterio de la existencia?
b. ¿Cuáles son los fundamentos de nuestras certezas?
c. ¿Por qué cambian las culturas?
d. ¿Cuál es el sentido y causa del existir del cosmos?
e. ¿Por qué no actuamos, directamente, como los animales?
1
Inferir
Jaspers encuentra que el valor de la filosofía es algo muy discutido, pues no se encuentran en ella unanimidad ni universalidad, como sí se encuentran en los resultados de la ciencia. Al reflexionar sobre esta idea llega a:
a. afirmar que la certeza de la filosofía es distinta a la científica y por lo tanto, es imposible que arroje resultados similares.
b. plantear que el objeto de la filosofía es diferente y superior al de la ciencia, pues ella se ocupa de la totalidad del ser y no de objetos específicos.
c. plantear que en cuestiones filosóficas todos los hombres se creen competentes y por lo tanto, no hay acuerdo entre ellos.
d. demostrar que las verdades científicas involucran a todo el género humano, mientras que las filosóficas sólo a unos pocos.
e. la filosofía como tal, no tiene valor alguno diferente al de una simple diversión.
1
Argumentar
¿Tiene sentido la vida humana? Elija una de las alternativas y defienda con argumentos su posición:
1) Sí lo tiene. Cumplir la voluntad divina;
2) Sí lo tiene. Crear riqueza y engrandecer a la patria;
3) Sí lo tiene. Luchar por la justicia y promover la
vigencia universal de los derechos humanos;
4) No lo tiene. Solo somos una especie animal más que ha surgido recientemente en la evolución de la vida sobre la Tierra;
5) No lo tiene. Mientras existan los seres humanos los poderosos dominarán a los débiles.
6) No lo tiene. Todas las obras humanas desaparecerán con el tiempo.
2
Analizar
Explique en cuáles de estos usos de la palabra “sentido” podemos preguntarnos por el sentido de la vida humana.
(Se adjunta texto de Carla Cordua y rúbrica)
2


"Evaluación al interior del aula..." Föster & Rojas



Presentación de katherine González, Paola Flores y Gianinna Chacano.

"EXÁMENES" Castillo y cabrerizo



Presentación de Siomara Pizarro y Ulda Toloza

"EVALUAR: TENER, PODER Y VALER" de Pardo, Bejarano, Henao & Valero.

"LO BUENO, LO MALO Y LO FEO: LAS MUCHAS CARAS DE LA EVALUACIÓN" de Moreno-Olivos.

Lo bueno, lo malo y lo feo: las muchas caras de la evaluación
Tiburcio Moreno-Olivos
Resumen
En los últimos años la evaluación ha tenido un gran impulso en el sistema educativo, de modo que actualmente ocupa un lugar destacado en los centros escolares. La evaluación tiene diversas aristas que producen distintos efectos en la vida de los sujetos y las instituciones educativas. 

Presentación
La década de los noventa, en la educación pública en México, irrumpe la evaluación y surgen la mayor parte de los organismos, agentes y programas evaluadores. Desde entonces, la evaluación ha ido infiltrándose sigilosamente, pero con la fuerza suficiente para permear todos los niveles educativos. Esta tarea se emprendió con la convicción, por parte de las autoridades y líderes educativos, de que la evaluación nos conduciría a lograr la calidad de la educación, haciendo al sistema más eficiente y transparente. Pero no ha sido así en absoluto, lo cierto es que no han sido tan espectaculares como los promotores oficiales y sus seguidores han pretendido hacer creer. La evaluación es un proceso multidimensional, complejo y polémico en todas partes del mundo. La evaluación, al igual que un prisma, tiene muchas caras; con logros y efectos indeseables.

LO BUENO
La evaluación como recurso imprescindible para lograr la calidad
El término de calidad  siempre va a guardar una relación intrínseca con la evaluación. Toda evaluación siempre se hace con base en un modelo que sirve como patrón o estándar de comparación, a partir del cual se determina el mérito o valor del objeto evaluado. El estándar indica lo bueno que debería ser. Pero al tener un carácter subjetivo, fijar estándares es pues una labor sumamente difícil.

La evaluación  es una práctica que llegó para quedarse y por consecuencia ha llegado la rendición de cuentas, pues el sistema estatal de educación opera con fondos públicos, por tanto, el manejo del dinero debe hacerse con absoluta transparencia.
Emerge una cultura de la evaluación,  aún incipiente, que se está emprendiendo con errores y tropiezos. Pero,   si la evaluación no puede eliminarse, hay que sacarle el máximo provecho posible. Realizando buenas evaluaciones (no muchas, las necesarias).

La evaluación entendida como un proceso formativo
Desde que Scriven (1967), en el discurso se han enfatizado las bondades de la evaluación formativa, aunque en la práctica ésta ha permanecido a la sombra de la sumativa, cuya hegemonía el sistema educativo sigue siendo notoria.
Una de las funciones pedagógicas más importantes es aquella que se emplea para que los evaluados identifiquen y reconozcan las fortalezas de su aprendizaje y lo que aún les falta por lograr. La evaluación formativa, se caracteriza por ser continua y estar integrada de manera natural en el proceso de enseñanza-aprendizaje mientras éste ocurre, no debe ser vista como un agregado al final del proceso (Gimeno, 1995; Moreno, 2004).

La evaluación como fuente de motivación para aprender
Una de las funciones pedagógicas más importantes de la evaluación es la motivación que puede producir en los participantes.  Las formas en las cuales la evaluación puede afectar la motivación y la autoestima de los alumnos, así como los beneficios que implica comprometerlos en la autoevaluación, sugieren que ambos merecen una cuidadosa atención.
La mayoría de nosotros hemos crecido en aulas en las cuales nuestros profesores creían que la forma de potenciar el aprendizaje era maximizar la ansiedad, y la evaluación siempre tenía que ser el intimidador más grande. Según esta óptica, se piensa que se puede motivar a los alumnos para un esfuerzo mayor, “estableciendo estándares académicos más altos”, “subiendo el listón” e implementando más pruebas de alto impacto. Pero hay que hacer notar, sin embargo, que esto es cierto sólo para algunos alumnos.
Otro amplio segmento de la población escolar, cuando es enfrentado con un reto todavía más difícil que el primero en el que ya ha fracasado, no redoblará sus esfuerzos, verán los altos estándares y las demandas por puntuaciones más altas en las pruebas como inalcanzables, y caerán en la desesperanza

Evaluación del aprendizaje y para el aprendizaje
Podemos usar la evaluación para aprender, pues si las evaluaciones del aprendizaje proveen evidencia del logro para informes públicos, las evaluaciones para el aprendizaje sirven para ayudar a los estudiantes a aprender más. El efecto de la evaluación para el aprendizaje consiste en que los alumnos se mantengan aprendiendo y permanezcan confiados en que ellos pueden continuar aprendiendo productivamente, que no caigan en la frustración ni en la desesperanza.
Si deseamos maximizar el logro de los educandos, debemos poner una mayor atención a la mejora de la evaluación de aula (Stiggins, 2002).

LO MALO
Una evaluación que profundiza la desigualdad
No hay una evaluación diferenciada ni ajustada a realidades tan distintas. El descuido en la difusión de los resultados de la evaluación del aprendizaje, desde luego, mina la confianza y la moral de las escuelas, daña la autoestima de los alumnos y sus profesores, con lo que se discrimina a los grupos desfavorecidos y se perpetúan las diferencias entre escuelas e individuos.

Evaluación que refuerza una cultura de fiscalización
Una dimensión negativa de la evaluación es cuando se emplea con fines de control de los alumnos. A partir de los resultados de la evaluación, se establece un ranking y según la posición que se obtenga en dicha clasificación, se reparten premios y castigos a los individuos evaluados.
Desde esta postura se concibe a la evaluación como un mecanismo de control a distintos niveles: de los profesores sobre los alumnos, del centro educativo sobre los profesores y alumnos, y de los administradores y diseñadores del currículo sobre el sistema, o sea, sobre todos y cada uno de los anteriores (Fernández, 1994).

Evaluación que prioriza sus funciones administrativas
Lo que trae como consecuencia:
a) fomentan un significativo individualismo al estimular la competencia entre los alumnos para la obtención de ciertas recompensas;
b) criterios de evaluación poco claros;
c) informes de evaluación deficientes;
d) la evaluación en manos de personal improvisado, lo que pone en duda su formación, capacidad y objetividad en la tarea;
e) evaluación al servicio de satisfacer las necesidades de información del sistema burocrático-administrativo, antes que de los alumnos y los profesores;
f) prácticas que refuerzan repartir premios y castigos a los evaluados,
g) evaluación que modela el tipo de alumno al que se debe aspirar si se quiere tener acceso a los beneficios que promete, entre otros.

Mucha evaluación pero sin cambios
Hacer muchas evaluaciones, automáticamente permitirá a los alumnos van a mejorar su actuación, falso. La evaluación por sí misma no mejora la educación. Por lo tanto, hay que tener claro el para qué de las evaluaciones que hacemos y qué valores son los que se están promoviendo. 

Implementación de programas educativos que después no se evalúan
Hemos sido testigos de cómo surgen iniciativas referidas a la evaluación del aprendizaje, para las que se destina una suma considerable de recursos, sin que posteriormente se evalúen sus resultados.

LO FEO
Homogeneidad que niega la diversidad
La evaluación es un claro ejemplo de esta política que homogeniza realidades tan disímbolas.
Las pruebas nacionales estandarizadas que se aplican actualmente, por su propia naturaleza y diseño, no pueden reconocer la diversidad de las poblaciones escolares a las que se les suministran, aunque la información que brindan y las decisiones que se toman a partir de estos datos, sí que están afectando de manera significativa la actuación de los centros escolares, y la vida presente y futura de los sujetos evaluados.

Usos segados de los resultados de la evaluación… cuando se usan
Una práctica común es que los resultados de la evaluación del aprendizaje no se empleen para un fin determinado, con lo cual parece que la evaluación sólo se hace para cumplir con una exigencia administrativa, y una vez realizada ésta, la información se guarda en el cajón sin que pase nada.
También es frecuente el empleo de los resultados de la evaluación para justificar ciertas políticas o programas que responden a los intereses particulares de un individuo o grupo, el cual tiene el poder para patrocinar una evaluación que sirva a sus propósitos, cualesquiera que éstos sean.

Evaluación que fomenta la cultura de la simulación
La evaluación se ha empleado para guardar las apariencias y decir que todo marcha bien, sobre todo en tiempos aciagos en los que se sabe precisamente que las cosas no andan bien. A nivel micro lo que se pretende es ocultar las debilidades, vacíos o carencias para salir bien librado del juicio evaluador.
El fin justifica los medios, no importa si los medios empleados son éticos o lícitos.
Pero lo anterior no sólo ocurre con los alumnos, también los docentes han desarrollado sus estrategias simuladoras, por ejemplo, sabemos de maestros que piden a sus alumnos con bajo rendimiento que no asistan a clases el día que se va a aplicar a su grupo el examen de conocimientos, cuyos resultados se tomarán en cuenta como parte de la evaluación docente, sólo para evitar una mala evaluación. Nuevamente, el fin es lo más importante a costa de lo que sea.

Evaluación conducida por personal improvisado
“Todos sabemos de evaluación, porque alguna vez hemos sido evaluados”. De acuerdo con Nevo (1997), para ser un evaluador competente y fiable se necesita la combinación de una amplia gama de cualidades y características, entre las cuales destacan: a) competencia técnica en el área de la medida y la investigación, b) conocimiento del contexto social y de la naturaleza del objeto de la evaluación, c) destreza en relaciones humanas, d) integridad personal y objetividad, y e) características relacionadas con la autoridad y la responsabilidad. Según este mismo autor existen varios tipos de evaluadores:
• Evaluador interno: generalmente es contratado por los responsables del proyecto y les informa directamente.
• Evaluador externo: no está contratado directamente por los responsables del proyecto y goza de mayor independencia.
• Evaluador profesional: tiene una amplia formación en evaluación y su principal responsabilidad consiste en dirigir evaluaciones.
• Evaluador práctico: no suele estar especializado en evaluación y su implicación en la misma representa sólo una parte de su trabajo.
  
Reflexiones finales
1.       La evaluación es polifacética, tiene diversos ángulos y cumple distintas funciones en la sociedad.
2.       La evaluación del aprendizaje en su dimensión constructiva tiene una cara positiva, formativa, retroalimentadora, que ayuda a los sujetos a aprender, a querer continuar aprendiendo y a desarrollarse. Ésta es la vertiente que debemos potenciar y promover en las instituciones educativas si queremos hacer de la evaluación un proceso de comprensión y mejora de la educación.
3.       La evaluación continúa mostrándonos su cara negativa, nociva, excluyente, que puede producir lesiones severas y daños irreversibles en los evaluados. Tal vez todos guardamos en el baúl de nuestros recuerdos experiencias de ambos tipos, tanto positivas como negativas, pero seguramente las anécdotas que más evocamos, incluso con vehemencia y hasta con cierta dosis de ansiedad o resentimiento, son aquellas en que sufrimos alguna vejación o fuimos víctimas de la evaluación en manos de un profesor perturbado.
4.       Las prácticas de evaluación afrontan la ausencia de un método o sistema de recopilación de información, confiable y válido, que pueda servir de base a los juicios valorativos; la falta de confiabilidad de la información; la existencia de interpretaciones y concreciones múltiples sobre conceptos como normas de resultados, estándares, criterios de calidad; la carencia de efectos de las evaluaciones para diseñar planes de mejoramiento de las instituciones que tengan como base un mejor conocimiento del estado en el que se encuentran, es decir, una base valorativa y, lo más grave, la tergiversación de los procesos escolares en razón de las evaluaciones de que son objeto.
5.       El sistema educativo , no presenta mejoras hacia una evaluación auténtica, más cualitativa, centrada en los procesos de aprendizaje y en las personas como aprendices; en vez de orientarse hacia una evaluación formativa, integral y humana, lo que se observa, a juzgar por la importancia revelada en la cantidad de recursos invertidos que actualmente están teniendo las pruebas nacionales estandarizadas para evaluar tanto a los alumnos como a las escuelas y sus profesores, es un preocupante retorno al pasado en el que la evaluación era concebida como sinónimo de medición, reduciendo así su alcance y coartando sus posibilidades de mejora de la educación.

6.       Lo que estamos presenciando en nuestro sistema educativo es que para que la evaluación goce de autoridad y legitimidad ha de adoptar la forma de medida. Esta perspectiva claramente entroniza el paradigma positivista de la evaluación que, a decir verdad, nunca se ha ido del todo del sistema educativo.